De Amigo a Traidor: Mi Historia

¿Cuántas veces hemos aferrado resentimientos que, en el fondo, solo nos han detenido? ¿Es posible que el verdadero acto de liberación sea dejar ir el pasado, en lugar de esperar que alguien más lo haga por nosotros?

Cinco años después de mi primera gran ruptura, ahí estaba yo, en medio de una fiesta, cara a cara con un antiguo amigo que había jugado un papel inesperado en mi vida. Este no era cualquier amigo, sino aquel a quien había confiado mis más profundos problemas sentimentales, ese que de confidente se convirtió en amante de mi pareja. Era la cara del traicionero, la personificación de un dolor que había arrastrado conmigo por demasiado tiempo.

En medio del bullicio y el alcohol, nos encontramos en la misma ciudad donde había llorado cada rincón, y donde yo había intentado sanar mi corazón roto. Mientras él se había mudado a Nueva York, yo había encontrado refugio en Bucaramanga, llevando conmigo un corazón herido y unas cuantas pertenencias. Esa noche, el dolor que creía enterrado resurgió con intensidad, como si nunca hubiera sanado realmente.

Con una mezcla de coraje y resentimiento, le exigí explicaciones. Quería saber por qué alguien a quien consideraba un amigo había traicionado esa amistad para convertirse en amante de mi pareja. En un dramático intercambio de palabras, él aceptó las culpas que había guardado en mi corazón durante años, y yo finalmente escuché las respuestas que había esperado con desesperación.

Cuando me alejé, sentí una extraña liberación. Durante tanto tiempo, había culpado a este amigo por acabar con una relación que ya estaba condenada al fracaso. Lo que me costó entender es que nuestra relación se desmoronó por la influencia de ambos, y que él solo aceleró un proceso que ya estaba en marcha.

En ese momento, comprendí que para realmente sanar, debía dejar atrás el pasado y darme permiso para seguir adelante. La verdadera liberación no proviene de la disculpa del otro, sino de nuestro propio proceso de perdón.

¡No Te Pierdas Nada!
Únete a Nuestro Boletín Semanal!

Recibe lo Mejor de MR.Blog Directamente en Tu Bandeja de Entrada