Netflix lo volvió a hacer… o eso parece. Adolescencia es una de esas series que la plataforma te empuja a ver con frases como “una de las mejores valoradas” o “técnicamente impresionante”. Pero seamos honestos: vi el primer capítulo y pensé ¿esto es todo? Sin embargo, algo me obligó a seguir mirando… y no fue la historia. Adolescencia es una miniserie británica de apenas cuatro episodios, grabada con una técnica que grita “arte”: plano secuencia. O sea, todo parece suceder en tiempo real, sin cortes, como una coreografía perfecta de drama, tensión y silencio incómodo. Fue rodada en los estudios de Pontefract, en West Yorkshire, y no es exageración decir que cada episodio es un ejercicio de precisión quirúrgica.
Lo que me gustó
1. El plano secuencia, el verdadero protagonista.
Cada episodio es un solo disparo. Literal. La cámara nunca corta, y eso crea una sensación de tensión y realismo que te atrapa incluso cuando la trama parece no hacerlo. Ensayaron cada capítulo como si fuera teatro. Lo grabaron hasta 10 veces por episodio para elegir la toma definitiva. Una locura.
2. Las actuaciones.
El actor que hace del padre tiene una contención emocional que te deja helado. Y Jamie, en el episodio 3, entrega un nivel de intensidad que recuerda a Mindhunter. No hay sobreactuación ni histeria. Todo es contenido, frío y brutalmente humano.
3. La dirección sensible y sin golpes bajos.
La serie no te manipula con música lacrimógena ni escenas gratuitas. El impacto viene de cómo está contada. Te enfrenta a lo que pasa con un silencio incómodo y necesario.
Lo que no me convenció
1. El primer episodio es una prueba de fe.
No tiene ese “gancho” típico. Es lento, distante, y si no le das tiempo, te bajás en el primer round. Pero si aguantás, lo que sigue es oro.
2. Algunos hilos quedan sueltos.
Hay reacciones que se insinúan pero nunca se desarrollan del todo. Como si los guionistas quisieran jugar a la ambigüedad, pero a veces se les va la mano.
3. ¿Realmente es sobre adolescentes?
A pesar del título, no esperes una serie que intente entender a los adolescentes. No es Euphoria, ni quiere serlo. Es más una historia sobre lo que pasa cuando los adultos se enfrentan a lo que no pueden controlar de ellos.
Opinión final y calificación
Adolescencia es una serie tensa, íntima y técnicamente impresionante. No es para todos, y está bien que así sea. Si buscás entretenimiento rápido, seguí de largo. Pero si te interesa ver cómo se puede contar una historia con precisión milimétrica, sin artificios, entonces sí: dale play con atención.
Mi calificación: 4/5.
No perfecta, pero sí arriesgada. Y eso ya es mucho en tiempos de series recicladas.